Gran descubrimiento, un verdadero lugar para el placer culinario y las artes musicales, ven los domingos y agrega a la excelente comida, un show de violín inesperado pero de gran nivel, el personal amable, atento, su comida de primer nivel, pídela con un poco de picante, no lo olvidarás , pide el plato variado y el frío probarás de todo. Así mismo pide el pisco souer, ven no te arrepentirás, tiene parque frente a la entrada, los precios excelentes. Le doy un 10 plus.